CLÁSICO BAJO CERO

Se jugaba un partido que en la previa despertaba más de lo que pasó en el desarrollo.  Comenzó  con la iniciativa del local queriendo tomar el protagonismo, pudo haber convertido uno o dos goles, pero la buena tarea del arquero Celeste, Martínez, le imposibilitaba el grito de gol a la parcialidad local. Moro traicionando sus orígenes pero apostando a la actualidad de sus dirigidos, con una formación ofensiva, con tres en el medio y tres delanteros netos, Rusch, Arce y Larrea, (este último de muy buen presente) se paró como protagonista, pero no pudo lastimar.

Una primera etapa que culminó sin sobresaltos, donde Bovril fue más que su rival, que sólo inquietó con aproximaciones de Martin López tras un disparo de media distancia que controló sin problemas Wigenauser y un desborde por la banda derecha de Racig, que cruzó el balón para la aparición de Pérez, en soledad, que la desperdició por arriba del arco.

El panorama del complemento no cambió demasiado,  ambos equipos se cuidaron y arriesgaron poco. En el local se sintió el cansancio debido al mayor desgaste que hicieron en la primera etapa y en la visita sentaba bien el punto conseguido en este estadio.  En síntesis, un flojo clásico regional donde tendrán que mejorar mucho para apostar a ser protagonistas en este 2015.

Por Rodrigo Asselborn