Luján Miño, el mejor cinco de la historia de la Liga

Por más que él prefiera sortear la pregunta, la respuesta la conocemos todos. Luján Miño fue uno de los mejores (sino el mejor) número cinco que tuvo la Liga de Paraná Campaña.
Un talento indiscutible, completo como pocos: marca, recuperación, toque, rotación y un juego que enamoraba hasta los rivales. Exquisito. Un tipo superdotado a nivel técnico y con una visión de juego de otro mundo.
Luján nació el 8 de marzo de 1967, en la ciudad de Viale. Comenzó a jugar en el club de sus amores cuando tenía 13 años. Se declara “hincha de la V hasta la muerte” y a los 16 años debutó en Primera. Hace una pausa, toma aire y remarca “siento un orgullo supremo por haber vestido la casaca de la V Azulada”.
De muy joven arrancó jugando de seis. Hasta que un visionario, el Tano Omarini, le dijo: “pichón, usted sabe mucho con pelota, necesitamos un conductor”; y le tiró en el pecho la icónica camiseta nº 5 de Viale FBC. De ahí en más, nació un romance para siempre y parte de la historia gloriosa de Viale FBC se escribió desde la mitad de la cancha, con Luján Miño como bastonero.
Luján no andaba con cosas chicas. Salió campeón en 1992, 1996 y 1999 con Viale FBC. También celebró un título con el recordado Universitario Deportes, de Libertador San Martín, en 2001. Y Además, vistió la casaca de Unión Alcaraz en el Torneo Argentino B de 1994.
Dice no recordar ningún gol en especial. “No hice muchos y para mí eso no es importante, me quedo con todos los amigos que me dio el fútbol”. Y señala que “cada época ha tenido grandes jugadores. Y que siempre hay que ser respetuosos con todos y valorar lo que nos han dejado como legado”.
Luján Miño estuvo siempre preparado para cada batalla. Y más allá del talento, se destacó por su humildad y perfil bajo. Todo lo que construyó en la cancha lo hizo con compromiso, respeto y amor por la camiseta. Este ícono absoluto y uno de los referentes indiscutidos de Viale FBC, se describe como un tipo común, que fue feliz jugando al fútbol…»
La verdad, dejanos decirte que se notaba, Luján. Se notaba que eras feliz.
Gracias por engrandecer con tu talento la Liga de Fútbol de Paraná Campaña.

Luciano Mastaglia – Dx3